El 5 de octubre de 2005 Jose Maria Sanz Loquillo está registrando un concierto en el BEC (Bilbao Exhibition Centre) cerca de mi casa, en Barakaldo, que más tarde recibirá el contundente nombre de «Hermanos de sangre». Justo antes de ejecutar una versión de la imperecedera Mi calle de Lone Star, se refiere a ellos como la banda a la que veÃa ensayar cuando él era un niño. Es entonces cuando dice la frase: La infancia es nuestra patria.
Ignoro si la cita es suya o bien se la ha arrebatado a alguien. La verdad es que me da igual, desde entonces la utilizo como propia porque yo, que no sé de patrias y no creo en ellas, pienso que la infancia es el lugar común donde nacen tantas cosas fundamentales en el individuo que, de existir algo parecido al sentimiento patriótico en mÃ, debe habitar allÃ. En la infancia se descubre todo con la suerte de ser por primera vez. Vemos una pelÃcula, leemos un libro o visitamos un pueblo con una intensidad superlativa, algo que con los años se convierte en nostalgia.
Recapacitando me doy cuenta que empezar una autobiografÃa con una cita de Loquillo no es muy cool, quizás debà haber elegido a un filósofo, un nobel, o al menos no a alguien que lleve tupé… Pero bien pensado no hay mejor manera de empezar a escribir sobre recuerdos que tienen como hilo de Ariadna la música y como punto de partida la infancia, en este caso la mÃa, tampoco muy cool, pero es que no tenÃa otra a mano. Y es que la musica ha marcado y marca mis dÃas, lo primero que hago cuando me levanto es poner la radio y a eso el añadido feliz de que en mi familia siempre ha habido mucha musica hace que haya crecido escuchando cientos de canciones me llevan ahora a hacer un recorrido musical de una vida que si bien no es muy interesante, al menos, como en la canción de Luis Eduardo Aute: Queda la musica.
Pienso hablar de muchas de las canciones que me han marcado, de los discos que guardo, de mis favoritos y de los que odio. Vamos, escribir muchas de mis conversaciones con mis amigos. Nuestras filias y nuestras fobias.
Nunca he entendido a esa gente que se autodenomina como un estilo musical: soy heavy, soy punk, soy rocker, soy… Trascienden un estilo musical a su ser. Dicha musica les envuelve y configura. Yo jamás podré denominarme asà porque no hay un género musical que me llene por completo por sà solo, quizás por eso el todo me llena tanto.Y como no soy el primero que detesta los prologos largos aquà me quedo, la próxima parada será hablando de la primera cassette que me compraron elegida por mÃ. Que por cierto aún la conservo.
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