
Ya llegamos a la última jornada del festival bilbaino, este dÃa el que les escribe estaba ya con bastante cansancio acumulado y decidió ver los conciertos que realmente le interesaban, esto es: Cycle, Primal Scream y Placebo.
A Cycle no les querÃa ver porque fuese seguidor, de hecho no tengo ningún disco suyo y tan solo habÃa escuchado las canciones conocidas, pero tenÃa ganas de ver si funcionaba el nuevo cantante y por supuesto fuà a ver a La China, que no me defraudó en ningún momento comportándose como me esperaba (diva insoportable y sin gracia).
El concierto comenzó con unos cuantos decibelios de más que me hizo alejarme un poco de la zona de bafles y de las primeras lineas del escenario.
Durante la hora que estuvieron repasaron su último trabajo, Sleepwalkers y no se olvidaron de temas más celebres como Confusión o Mechanical que la gente bailó sin pudor a pesar del solazo que caÃa a las 6 de la tarde.
A partir de aquà yo lo tenÃa claro si querÃa darlo todo en Primal Scream y Placebo (aunque al final tampoco fué asÃ) necesitarÃa de un descanso y eso mismo hice excepto durante 10 minutos que me acerqué a ver un poco a Asian Dub Foundation y me dà cuenta que descansar fue la mejopr opción, lo siento, no son mi estilo.
A las 22:30 Bobby Gillespie y los suyos se hicieron con el escenario principal para hacernos bailar con los viejos clásicos de siempre y con algún tema de su último disco Beatiful Future.
Bien es cierto que aunque algunos hits fuesen una versión de ellos mismos como fue el caso de Swastika Eyes o Kill All Hippies otros funcionaron y sonaron muy bien como Rocks, Country Girl o Jailbird.
El concierto me dejó a medio gas, no era el conciertazo que me estaba esperando, era la segunda vez que los veÃa y la primera vez fue todo un bombazo (me voy a prohibir segundas nupcias musicales), pero aun asà me dejó buen sabor de boca y me sirvió de lanzadera para lo que me esperaba después: Placebo.
La puesta en escena fué la más elaborada del festival junto a Depeche Mode, un conjunto de luces en el fondo que interactuaban entre las canciones y que no restaba protagonismo al trio principal.
VenÃan con nuevo baterÃa y el cambio no se notó en ningún momento, Brian Molko saltó al escenario para presentar el nuevo disco del grupo «Battle for the Sun» sin olvidarse de su clasicos.
Mientras iban sonando Special-K, Battle for the Sun, Bitter End, Every You Every Me o Taste In Men me dà cuenta que el concierto era aceptable pero que no diré nunca «Eh tÃo! yo estuve en el concierto de Placebo del BBK Live» y es que seguramente mucha gente salió encantada pero a mà me faltó una gotita para que me dejase completamente feliz.
Después de Placebo tocó retirada y a esperar al año que viene ya que según los medios locales el Bilbao Live sobrevivió al año de la crisis y no es para menos, !que por algo somos de Bilbao!.
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