Entrar al patio de butacas y ver que las dos primeras filas han sido quitadas para albergar decenas de cojines enormes de color gris plateado, tirados por el suelo, contemplar que también hay cojines de esos por entre la platea y ver que el escenario está tapado por una especie de telón, que podrÃa estar hecho de papel albal, con dos inmensos ventiladores a los lados, hace que saques todas las fotos que luego no te van a dejar. No sabes muy bien lo que vas a ver. Y quizás, a la salida, sigas sin saber qué has visto.
Y es que el espectáculo creado en 2002 por Ilan Azriel y Ella-Munk Azriel es difÃcil de explicar: No es una obra de teatro, pero tiene argumento, no es un musical pero la música acompaña toda la obra, no es danza, pero todo el mundo baila, no es magia, pero ocurren cosas increÃbles… Entonces ¿Qué es The aluminium show? Pues todo eso y nada de eso. Es un espectáculo, en ocasiones espectacular, familiar (lo venden como una obra para niños de 5 a 95 años, aunque hay pasajes que no me parecen muy para niños), donde la interacción con el público va ganando en intensidad según pasan los minutos. Nota para aquellos que están aterrados ante la posibilidad de ser cogido y llevado al escenario: SÃ, algo hay de ello…
Pero de lo que no cabe duda es de que éste espectáculo está hecho para pasárselo muy bien. Es divertido, en ocasiones fascinante, en otros momentos facilón (lo de los cojines y el confeti es más bestia con Kiss), incluso por momentos puede dar la sensación de deja vú, pero es cierto también que la sonrisa no se borra en la hora y media que dura el evento. Y eso no está nada mal como propuesta.
Es mejor no contar ni saber mucho sobre éste show, para poder disfrutarlo más. Solo que son una serie de jóvenes que se mueven muy bien, que las ocurrencias a partir de las formas y el movimiento se suceden ante el asombro del espectador, y que, posiblemente, en medio de ésta crisis que nos tuerce la sonrisa, éste show alumÃnico nos haga un poquito felices, aunque una vez en la calle todo vuelva a ser de otros colores. Estará en el Teatro Arriaga hasta el 23 de Diciembre.
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