Etzi (Dar-dar produkzioak)

Cartel promocional de la obra EtziUna escenografía casi diríamos que minimalista, unas paredes que son bastidores con telas grises que se convierten en opacas o transparentes a placer, una mesa y un tocadiscos vintage. Y tres personajes (personas) en busca de sitio, que cabizbajos, preocupados, tristes, se mueven en círculo sin acabar de encontrarse. Y la música de Pello Ramírez (su último disco, Eskuz lurrari, es sencillamente espectacular). Así comienza Etzi (Pasado mañana) una obra de teatro que, a pesar del tema que trata (el síndrome de Down y su día a día) es una obra luminosa, vitalista y, en ocasiones, divertida.

Mattin (increíblemente interpretado por Asier Oruesagasti) escribe una especie de diario que coge su abuela (inconmensurable Pilar Rodríguez). Y en flashback nos cuenta de manera sencilla el día a día con su hermano Bruno (Gorka Zufiaurre), aquejado con el síndrome de Down, su abuela y su abuelo Pedro (el imprescindible Jose Ramón Soroiz). A través de recuerdos del día a día con una persona con ese síndrome, iremos viendo las alegrías, tristezas, lo difícil, y gratificante que es la vida.

Una obra breve (apenas una hora) pero intensa, dramática y divertida a partes iguales. La compañía teatral Dar-dar produkzioak ha optado ésta vez por un cuento de Karlos Linazasoro que es resuelto en las tablas de manera eficaz con música, proyecciones y flashbacks dentro de flashbacks. Una obra interesante y necesaria. La dirige Asier Zinkunegi, que hace una pequeña aparición como camarero

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