A mi ni me va ni me viene, que se suele decir, porque no tenÃa pensado asistir, pero no por eso voy a dejar de criticar la actitud de los promotores, que cambian a su antojo fechas y lugares de conciertos o carteles de festivales sin que les importe lo más mÃnimo si perjudican a aquellos que les llenan las arcas con su dinero, el público.
Y es que lo del concierto de Muse en Barcelona es de traca, estaba previsto para el viernes 27 de Noviembre en el Palau Olimpic de Badalona, asà que seguro que muchos fans de la banda, tras hacerse con una entrada prepararon una visita de fin de semana a la Ciudad Condal, para de esta manera aprovechar el viaje, ya sea en autobús, coche, tren, barco o avión.
Pero a falta de menos de una mes para que este concierto se celebre, los promotores anuncian un cambio de lugar, del Palau Olimpic de Badalona al Palau Sant Jordi, y lo que es peor, de fechas del viernes 27 de Noviembre al Martes 24.
La culpable de este cambio de fechas al parecer es la final de la Copa Davis que se celebra entre el 4 y el 6 de Diciembre en el Palau Olimpic de Badalona, pues las obras necesarias para que esta pueda disputarse impiden la celebración del concierto.
Ante esto cabe preguntarse quien el el que no tiene escrupulos, los gestores del Palau Olimpic que no informaron a los promotores de esta posibilidad o los promotores que se cayaron a sabiendas de la misma. Eso sÃ, estos últimos en vez de buscar una localización alternativa para ese mismo dÃa, deciden adelantar sus fechas y dejar a multitud de fans con el culo al aire.
Pero no os preocupéis, que los «comprensivos» promotores han anunciado que se devolverá el importe de la entrada a todos aquellos que la tenÃan comprada y que no puedan acudir el dÃa 24, eso sÃ, del problema de la gente, que para ahorrarse dinero organizaron su desplazamiento hace tiempo, con los billetes comprados y con el alojamiento reservado no dicen nada de nada.
Se que es algo difÃcil de llevar a cabo y ni siquiera se si llegarÃa a buen puerto, pero en alguna de estas habrÃa que llevar a los promotores a los tribunales, exigiendoles el importe de las entradas más los gastos causados por la devolución de billetes y alojamientos, para ver si de una vez por todas hubiese una sentencia en firme que sentara precedente y asà los promotores se lo pensasen mejor en futuras ocasiones antes de liarla de esta manera.
VÃa: Hipersónica
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