PJ Harvey, la Corresponsal de Guerra

El pasado lunes 14 de febrero salió a la venta «Let England Shake«, el nuevo trabajo de una de las artistas más veneradas de la escena internacional, la señora Polly Jean Harvey. Un disco que algunos tildan de rupturista respecto a anteriores obras de la inglesa y que puede auparla (por primera vez en su carrera, aunque cueste creerlo) al top 10 de discos más vendidos de la semana en el Reino Unido.

Estas son algunas noticias que están surgiendo estos días en torno al nuevo trabajo de PJ Harvey, pero no son las únicas; de hecho, hay algunas que son verdaderamente sorprendentes. Por ejemplo, esa que dice que a la cantante británica le han ofrecido la oportunidad de ejercer como corresponsal de guerra después de que ella mostrara su interés por la profesión y se basara en ella para escribir este «Let England Shake».

Y es que sólo a una mente tan artística como la de Polly Jean se le puede ocurrir pensar en la figura del compositor de guerras. «Sí que hay artistas o fotógrafos de guerra, como Steve McQueen. Fantaseé con que había sido nombrada como compositora de guerra y me reté a mi misma», señaló la autora del grandioso «Stories form the City, Stories from the Sea» a la Radio 4 británica, declaraciones que le han servido para que los responsables del Imperial War Museum de Londres estén estudiando la posibilidad de ofrecerle a PJ Harvey una corresponsalía en alguno de los lugares en los que Reino Unido mantiene tropas actualmente.

Imagínense pues, la escena: la cantante con el típico chaleco con el emblema Press (¿o debería poner Artist?), un casco de guerra, en primera línea de fuego, armada con una hoja, un papel y un arpa, componiendo temas crípticos basados en la terrible experiencia que supone cubrir un conflicto bélico… Imagínense, por tanto, qué podría salir de ello…

En todo caso, acudiendo o no a la guerra, la señorita Harvey se ha sacado, para variar, un gran disco de la manga. Sólo lo he escuchado un par de veces y me ha cuativado. No tiene la crudeza o la contundencia de sus trabajos más recordados pero tiene un magnetismo difícil de explicar; las guitarras pierden peso, apareciendo de forma más sosegada y se introducen más complementos, más sonidos (cornetas militares en «The Glorious Land»). Me resulta un disco sumamente emocionante, con medios tiempos maravillosos y con una voz de Polly Jean que puede desasosegar a sus fans más clásicos y que a mí (quizá porque no lo soy) me resulta conmovedora y espectacular, alejada de la rabia, pese a que sus letras apuntan a un contenido mucho más crítico, mucho más político… No sé, son las primeras escuchas, no soy un gran conocedor de la obra de PJ Harvey, pero podría resumir esta pseudo-crítica en que falta rabia en la forma, sobra emoción en el fondo. Para mí, discazo a la vista.

Escúchalo en Spotify.

Vía: Europa Press