La verdad es que desde la posición de privilegio de los grandes festivales de música estivales estos se permiten hacer toda clase de atrocidades, primero contra el público y segundo contra festivales más pequeños.
Y es que imponen claúsulas a los grupos que impiden que estos sean presentados como parte del cartel de festivales más pequeños, a pesar de estar firmados, hasta que no haya concluido su festival o estén muy próximas la fechas de celebración (y por lo tanto ya hayan vendido la mayor cantidad de entradas posibles), para evitar que festivales del tipo Ebrovisión o Sonorama les «roben» público (la verdad es que nunca he comprendido este nivel de paranoia).
Otras veces se meten en batallas entre ellos mismos, y mueven sus fechas como a ellos les venga en ganas, dando situaciones como las de este año en la que coinciden en fechas Summercase y FIB, o propiciando el cambio de fechas de otros festivales menores, como le paso en su dÃa al Ebrovision, que se vio obligado a mudarse de primeros de Julio a finales de Septiembre (aunque aquà creo que al final con el cambio han salido ganando).
A veces incluso le hacen la puñeta a su propio público, y se sacan de la manga eventos como el Saturday Night Fiber, al que se puede asistir por «cuatro» duros (comparado con el precio del bono del festival) y al que llevan a parte fundamental del cartel del festival, consiguiendo que a la gente de Madrid que se decanto por el FIB por artistas como My Bloody Valentine, Mika, Babyshambles o Hot Chip se le quede cara de tonto.
Y para finalizar lo peor es cuando esconden hasta última hora la cancelación de uno de sus conciertos estrella, cancelaciones, las de los cabezas de cartel de un festival, que a mi modo de ver deberÃan de suponer la posibilidad de devolución del bono si lo compraste cuando el artista formaba parte del festival.
Y esto último es lo que ha pasado con el rumor de la cancelación de la actuación de Leonard Cohen en el FIB, pues solo tras extenderse lo suficiente el mismo, intentando de esta forma que el artista aparezca en su cartel el mayor tiempo posible, los responsables del FIB han tomado la palabra para decir lo siguiente (leido en Hipersónica):
Ante los rumores de la cancelación de Leonard Cohen de su actuación en FIB Heineken 2008 y la preocupación que pueda estar provocando entre sus fans, la organización del Festival estima oportuno comunicar que ésta no es definitiva ya que se está renegociando con el artista canadiense y nos encontramos a la espera de una comunicación oficial del management del mismo.
Lo cual viene a decir que efectivamente la actuación estaba cancelada y que ellos no lo habÃan anunciado (ni siquiera Leonard Cohen habÃa quitado la fecha de su gira en la web), y la noticia me parece lo suficientemente relevante como para que los responsables del FIB la hubiesen comunicado tan pronto como el artista se cayó del cartel, a pesar de que estén renegociando (y sigo sin comprender por qué sigue apareciendo anunciado en la web del FIB), pues la ausencia o presencia de Leonard Cohen en el festival seguro que condiciona la decisión de ir o no ir de mucha gente.
Y es que a pesar de que muchas veces las pretensiones de los artistas son exageradas y sus caprichos solo son superados por sus propios egos, los precios de estos grandes festivales estivales son lo suficientemente elevados como para que sus clientes (y recordemos que el cliente siempre tiene la razón) seamos puntualmente informados ante cualquier novedad o modificación que se produzca en sus carteles.
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