El acuerdo que desde 2006 mantenÃan Warner y YouTube, por el que está última podÃa alojar los videoclips de los artistas que forman parte del catálogo de la primera a cambio del reparto de los ingresos que las visualizaciones de los mismos podrÃan generar, se ha roto y poco a poco están desapareciendo estos vÃdeo del Ãndice del popular sitio de vÃdeos online.
La dificultad que tiene YouTube de encontrar la formula mágica para convertir la ingente cantidad de visitantes que recibe en una fuente de ingresos de la misma magnitud ha propiciado que Warner no este contenta con los ingresos que el anterior acuerdo le reportaba y le plantease la posibilidad a YouTube de pagar una cantidad fija por cada visualización de cada uno de los vÃdeos de artistas de su catálogo.
Estas demandas han sido rechazadas por el portal de vÃdeos y por eso poco a poco están desapareciendo los contenidos relacionados con los artistas vinculados a Warner.
Un duro golpe para ambas, para Google en forma de pérdida de contenido de calidad y para Warner por dejar escapar la gran plataforma de promoción que es YouTube.
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