No habÃa incluido todavÃa ninguna canción española en esta serie de Mis Canciones de la Década, a pesar de que, evidentemente, las ha habido. A pesar de ello, me ha costado decantarme o hallar una que fuese especialmente significativa. En un principio me habÃa decantado por ‘La Revolución Sexual‘ de La Casa Azul, pero ésa ya se la apuntó Jaet en un comentario al inicio de este serial.
Por tanto, seguà revisando, rebuscando y recordando qué canciones patrias podrÃan formar parte de esta recopilación. Y al final, pienso que su hallazgo era más evidente de lo que en un principio me parecÃa.
Más que nada porque corresponde a la banda española que más me ha marcado en la historia de la música hecha en este paÃs. El grupo por el que uno amplÃa su melomanÃa hasta lÃmites insospechados. El conjunto por el que uno descubre que existen muchos proyectos en nuestras fronteras más allá de los tÃpicos grupos españoles de radio-fórmula.
SÃ, Los Planetas, quiénes si no. Y es que a pesar de que los discos más reconocidos de los granadinos se dieron en la década de los 90, en estos diez años, J y compañÃa han seguido sacando grandes trabajos, que, aunque hayan flaqueado frente a obras anteriores, siempre han estado, en mi opinión, un puntito por encima a la mayor parte de sus bandas coetáneas.
Y de entre los discos sacados en este siglo XXI por parte de Los Planetas, ‘Unidad de Desplazamiento‘ para mà es el mejor. Quizá es porque se trata de un trabajo sacado cuando la fiebre planetaria seguÃa en un punto álgido. A lo mejor porque, en el lejano 2000 en el que fue editado, conformó el grueso de la banda sonora de algunos de los momentos más importantes de mi vida. O a lo mejor y simplemente, porque se trata de un discazo repleto de impresionantes canciones.
Y de entre ellas, puestos a elegir una, me quedo con ‘Un Buen DÃa‘, tercer single extraÃdo de este trabajo, que presenta a unos Planetas en estado de gracia, con un punto optimista, alegre y a la vez con un poso agridulce.
Un hit ampliamente reconocido y siempre demandado en los directos de los granadinos. Una canción por la que seguir creyendo en esta banda y por la que rendirse a sus pies. Una canción, por tanto, perfectamente encajable en mis canciones de la década.
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